miércoles, 7 de julio de 2010

El Ocaso de un Amor

Me dejaste en una esquina
con la cola entre las piernas
y un amor profundo
cargado de responsabilidades
y culpas.
con más de un nombre en la cabeza.
te busqué, obligado por el olvido
para remediar en fuego que quemaba
la frágil memoria.

Nunca sabré qué tan fácil se te hizo,
ni cómo lo lograste así. rápido.
olvidarme.
sin mayores dolores.
porque sí sé de tus temores,
porque el desear, el anhelo de navegar
da miedo y encumbra nuestra mente
como el vuelo de los pajaros,
en una caída
un salto conciente
al vacio.

Metí los pies en el denso pantano
del recuerdo
y sufrí.
y dormí caminante
soñando vago
y perdido.
pero un beso frío
hizo lo que el tiempo no pudo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario