bailamos bajo la luz de la luna,
nos abrazamos por ultima vez
y escribimos en el suelo que nuestros nombres
nunca jamás volverían a ser los mismos.
desde ese día no te veo, hace ya 5 años, pero siempre pienso
en cómo sería todo si hubieras visto la ultima hoja del libro que te regalé y nunca terminaste.
No hay comentarios:
Publicar un comentario