miércoles, 9 de noviembre de 2011

Sangre Blanca



no somos la evolución,
tampoco somos lindos, más bien nos odian, tenemos la nariz aguileña, el semblante marcado por el cansancio del trabajo duro. nuestra piel está seca, nuestras manos partidas, yo trabajo, el de mi lado también. no cargamos con ideas, eso es para los patrones, futres y si peleo, peleo con quisca y a combos, yo soy un peón y mi ropa está sucia y mi sombrero roto. no uso corbata, ni zapatos de charol, menos perfume. yo sé cultivar el maíz y la papa, se cocinar con la tierra y leer las estaciones en las estrellas. la sangre que cae de mi cuerpo es una ofrenda a mi madre. yo trabajo pa' comer y pa' que mi familia viva. me como la carne de mis animales, yo los mato. no somos la evolución, tengo los ojos negros y el pelo sucio y negro, grasoso. el sol me quemó los labios y nunca he visto el mar. no somos la evolución, soy quien cosecha trigo y el tomate, el que aprendió a montar los caballos a pelo y el que nació en la tierra. tengo un nombre castellano y un apellido indígena, soy lampiño y feo, bruto, torpe, el idiecito del taparrabos y las plumas en la cabeza. soy la sangre incólume en tu sangre, el resto de vida que queda. no somos la evolución, para ti somos la mierda que nosotros mismos recogemos por las noches.

No hay comentarios:

Publicar un comentario